lunes, 1 de agosto de 2016

Críticas de un gollum #2: ¿Podemos escribir lo que nos dé la gana? Libertad de expresión.

¡Holaaaaaaaa! Cuánto tiempo, lololoolololololooooo!!! Ya sé que no me habéis visto el pelo virtual en meses, y he perdido seguidores por ello, pero yo cada vez que me voy... ¡VUELVO! Y ahora que ha llegado agosto y no tengo exámenes, ni viajes, y solo algunas pocas paranoias mentales, puedo regresar al blog. 

La entrada de hoy no es una reseña ni nada, sino más bien una reflexión (pincha aquí para ver la anterior). Explico cómo surgió la idea de esta entrada: Como ya habréis visto por las redes sociales, la escritora María Frisa y la editorial Alfaguarra (mmm... sobra una <<r>>, ¿no?) han precalentado el horno de la polémica para que nosotros, jueces todopoderosos de Twitter, podamos matarnos unos a otros por un pastel de carroña; en este caso, la carroña lleva título y se llama 75 consejos para sobrevivir en el colegio.

A continuación, pongo un par de capturas cogidas por Twitter y Face por si no lo habéis leído, que estoy seguro de que sí si tenéis un mínimo de 'vida' en las redes sociales. Ya os podéis imaginar el revuelo, porque telita con los consejos.





¿Debería un libro ser reeditado o sacado del mercado por soltar chorradas políticamente incorrectas? Desde lo más profundo de mi pensamiento liberal, grito: ¡NOOOOOOOOOO! 

Ahora, reformulo la pregunta: ¿Debería un libro DIRIGIDO A NIÑOS, en el que la prota incita al acoso y a la superficialidad, ser reeditado y sacado del mercado? Desde lo más profundo de lo que queda de mi pensamiento racional y empático, grito: ¡JODER, CLARO QUE SÍ! 

Sin contar con escritores lameculos (amigos) de la escritora, otra tanda de escritores y periodistas con la constante necesidad de ir a contracorriente y padres que no desean arrepentirse de comprarles el libro a sus hijos, he visto a muchas personas defender a capa y espada la presencia de este libro en las estanterías de los más jóvenes y en las librerías. Todo, claro, bajo el argumento de ''LIBERTAD DE EXPRESIÓN''. Pero, ¿qué es esa libertad? ¿Es poder decir lo que te salga del badajo con derecho a no sufrir ninguna consecuencia? ¿Qué opinan los que defienden el libro de Frisa si mañana les regalo a sus hijos, hermanos... una novela hecha por mí, en la que diga que hay que enfadarse con las niñas si llevan vestidos cortos, hay que llamar <<maricones>> a los niños que no juegan al fútbol o que cuando mamá no nos hace hamburguesas hay que ponerse a romper los muebles? ¿Y si además añado que hay que meterse con los niños negros porque es un color feo? Poder puedo hacerlo, estoy en todo mi derecho, ¿no? Libertad de expresión. 

Pues no, yo no pienso eso: la libertad de expresión está muy bien para expresar tu opinión sobre los temas que te dé la gana (en contra o a favor de un político, por ejemplo), para expresar tus sentimientos, pero NO para incitar a ningún colectivo o sector a cometer actos atroces. Por ejemplo, me parece perfecto que el imbécil de turno publique un libro explicando por qué la homosexualidad es una enfermedad en su punto de vista, pero voy completamente en contra si ese libro anima a los lectores a discriminar a los homosexuales. Se me entiende, ¿no?

Otro motivo para defender el libro de Frisa es que está hecho con humor e ironía... JAJAJAJAJAJAJJAAJAJAJAJAJA. Partiendo de la base que la obra no hace ni puta gracia (a lo mejor mi sentido del humor es más exquisito de lo que creía, es culpa de mi sangre azul...), esa falacia me suena mucho a la de los trolls de Twitter cuando rebuznan ''biba la matansa de Horlando'' alegando que es una broma. Y es que en este caso el humor no es una razón, sino una excusa. El humor negro (aunque en este caso no llega ni a gris) hay que saber hacerlo, mucha gente se cree humorista hoy día.


Profundizando más en el asunto del humor, hay quien no tarda en afirmar que los niños entenderán la fina ironía y la elegante sátira del libro. No olvidemos que son niños, diablitos pequeños que viven en un constante proceso de aprendizaje, adaptación y asimilación, ¿quien no asegura que no emplearán lo aprendido por el libro? ¿No tienen los padres y profesores otros libros más divertidos y con mejores valores que transmitir? Yo no soy papá (gracias al cielo, porque ya lo que me faltaba), pero si viera en esa tesitura, les compraría libros tipo Charlie Small: obras con gran imaginación, humor y exaltación de valores decentes. Ya cuando los diablitos evolucionen a demonios, entonces podrán discernir lo que es irónico y lo que es de verdad. 

Doy gracias a Arceus por darme de peque las obras de Harry Potter y que mi modelo a seguir fuera Hermione Granger (aunque ese modelo duró un trimestre, yo era muy vago y ella una pequeña e insufrible sabelotodo). Y no es que fuera tonto, era un niño. Si tu hijo ha leído los libros de María Frisa y nunca ha molestado, pues felicidades, pero no hay nadie que asegure que no los habrá. 

En resumidas cuentas, con esta reflexión quiero decir: Sí, escribe lo que te dé la gana, habla lo que te salga de la boca, pero no incites a sectores sensibles a llevar a cabo actos discriminatorios para lucrarte ni para tus perversos fines. De lo contrario, estoy a favor de la censura. Todo tiene un límite.
En el fondo todos queremos ser como Hermione...
¿Qué? ¿He hecho algo mal?

Ah, que no se me olvide, que distinguidos y no tan distinguidos personajes de la literatura española han calificado a los que estamos en contra de la obra de Frisa como inquisidores, ¡y casi hasta asesinos! Todo porque un chico le dijo no sé qué cosa a la escritora por Facebook, ahora somos todos unos asesinos. La escritora me cae mal por una serie de cosas que he leído, pero vaya, que no la quiero ver muerta, ni tirada en una cuneta, ni secuestrada por la mafia rusa por petición de Putin; simplemente me gustaría que dejara de escribir tantas gilipolleces para niños.


Por cierto, dos cosas: 1) A Alfaguara ni agua, aunque sea de grifo. Doy gracias a la existencia de los epubs para poder descargarme sus libros sin darles un céntimo a esta editorial. Lo siento, pero mientras no vea yo que hagan algo con el despropósito de libro, de mi cartera no huelen NOTHING. Y 2), necesito que alguien, alguien, ALGUIEN, quien sea, me mande una pastillas por correo para soportar a la Duff, de verdad xDD Ah, y no sé si ya lo había dicho, pero he clasificado las entradas en una página (esquina superior derecha, debajo de PÁGINAS)

¿Qué opináis del tema y del libro? ¿Podemos escribir lo que queramos o hay que emplear la censura de vez en cuando?

¡Nos vemos esta semana con unas reseñitas! Aunque no tengo claro si haré una reseña positiva o negativa, necesito quitarme estrés xD ¡Un besito de pocholate!




2 comentarios:

  1. ¡Se te echaba de menos! ^^

    Me alegra verte por aquí, siempre es entretenido leerte. Y estoy completamente de acuerdo contigo. Cuando empecé a leer páginas del libro pensé: ¿Esto es una broma, no? O sea, sí realmente lo que quería esta mujer era hacer ironía y sarcaso, que haga un libro rollo 75 consejos para soportar a tu crío cuando empiece el colegio. Los padres van a pillar que es sarcasmo... pero hay niños que no -.- y esa mujer, que no se retracta... y va de ofendida y de víctima por la vida. Ya no puedo con ella...

    En fin, espero leer pronto esta reseñas ^^

    Besos*

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    1. Oish, gracias, me dices esas cosas y me sonrojo aunque no se note por el moreno :3

      El libro podría estar enfocado de una forma distinta, más 'inocente', incluso le daría un visto bueno al libro si se pusiera hincapié en los errores de la niña.
      Y, oye, que los tontos somos nosotros, como dio a entender la autora. Tampoco puedo con ella, no soporto a los escritores con el complejo 'Pérez-Reverte', creerse lo máximo y pensar que tienes la razón por tu fama. Ella misma se ha defendido como 'autora de éxito' en su Facebook, entre otras cositas, muy poca humildad y autocrítica.

      Sí, ya para este finde tengo reseñita, jijiji.

      ¡Que pases buen día... o noche, que ya son las 20:00! xDD

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